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Cosechas de granos básicos promedio en el altiplano y de Postrera en el resto del país permitirán una mejora en la disponibilidad de alimentos hasta abril/mayo en los hogares productores. La ingesta de alimentos también se incrementará en los hogares pobres con el establecimiento de la temporada de alta demanda de mano de obra, que proporciona los mayores ingresos anuales.
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El mercado tendrá un incremento estacional del suministro de granos básicos, lo que permitirá una disminución en los precios, igualmente acorde a la temporalidad, lo que permitirá una mayor capacidad adquisitiva de la población, facilitando el acceso a esos alimentos hasta al menos marzo/abril.
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La presencia de deudas y la pérdida de bienes en los hogares más pobres del corredor seco oriental y occidental, quienes sufrieron de varios años consecutivos de baja y hasta nula producción de granos básicos además de bajos ingresos debido a la roya del café, no han permitido una recuperación de la capacidad de resiliencia de estos hogares. Por lo tanto, estos aún se encontrarán clasificados en Estrés (Fase 2, CIF) durante todo el período de análisis.
Los supuestos utilizados por FEWS NET para desarrollar el escenario de seguridad alimentaria más probable para el período de octubre 2017 a mayo 2018 no han sido modificados.
Dado que se prevé una finalización de la temporada de Postrera con resultados dentro del promedio, y una situación similar para la cosecha de la región Norte, la disponibilidad de alimentos en los hogares productores mejorará signficativamente, respecto a los reportados en los últimos cuatro años, con reservas de alimentos que concluyen hasta abril/mayo. El suministro de granos al mercado nacional también se incrementará con producciones promedio a arriba del mismo en las zonas excedentarias, lo que implicará que los precios muestren un comportamiento similar al estacional, donde se marca una disminución hasta marzo en el caso del frijol negro, y hasta diciembre en el caso del maíz, que luego mostrará una estabilización hasta abril, con valores muy por debajo del promedio de cinco años. Esto tendrá implicaciones positivas en los hogares que dependen casi en su totalidad de la compra para su alimentación, puesto que permitirá un mayor acceso a los mismos. Los ingresos provenientes de la venta de mano de obra casual también permitirán una mejora en la capacidad adquistiva de los hogares más pobres, con una temporada promedio en cuanto a demanda y un jornal igualmente dentro de los parámetros normales; incluso en el sector cafetalero, con una demanda de mano de obra muy similar al año anterior. Estas actividades y el efectivo generado por las mismas serán de vital importancia para los hogares que no tienen tierra para producir.
Los hogares de gran parte del país estarán clasificados en inseguridad alimentaria aguda Mínima (Fase 1, CIF) hasta el final del período analizado en mayo 2018, dada la mejoría en la disponibilidad y acceso a los alimentos. No obstante, la mayoría de hogares del oriente y occidente del corredor seco se mantendrán en Estrés (Fase 2, CIF). Debido a mejores resultados en la producción de granos básicos y una temporada de alta demanda de mano de obra cercana al promedio, los hogares más pobres de estas áreas verán una mejoría en sus opciones de ingresos y en la ingesta de alimentos. Sin embargo, dado que han erosionado bastante su capacidad de respuesta y sus medios de vida durante los últimos cuatro años, los hogares aún están tratando de recuperarse y se requerirán más ciclos productivos con resultados promedio para hacerlo en su totalidad.
Este informe presenta un análisis de las condiciones actuales de inseguridad alimentaria aguda y cambios en la última proyección de FEWS NET respecto a los resultados de inseguridad alimentaria aguda en la geografía especificada durante los próximos seis meses. Conozca más sobre nuestro trabajo.