Altas temperaturas y lluvias esporádicas retrasan la temporada de Primera en Centroamérica

• Lluvias esporádicas en el Pacífico de Centroamérica reducen paulatinamente las condiciones secas de largo plazo, sin ser suficientes para favorecer la siembra para el ciclo de Primera, que reporta un retraso de hasta 20 días. Colombia, el oeste de Venezuela y el sur y norte de Haití también reportan una mejora en las condiciones de la vegetación.
• Las condiciones de sequedad persisten en la cuenca del Caribe Centroamericano y el centro de Venezuela, exacerbadas por las altas temperaturas. Se necesitarán precipitaciones abundantes y constantes para facilitar las actividades agrícolas y reponer los niveles de los ríos. 
• Se prevé el establecimiento de las lluvias en la región a partir de junio, con un incremento en los acumulados que podría ocasionar daños focalizados por exceso de precipitaciones y un mayor riesgo de plagas y enfermedades, debido a la continuación de temperaturas anormalmente altas.

Las condiciones secas persisten en gran parte de la región centroamericana, especialmente en la región Caribe, donde las lluvias no superan el 60 por ciento de las lluvias normales del período, representadas en tonalidades rojas, en la Figura 1. Incluso, dentro de estas mismas regiones se observan amplias áreas con valores inferiores al 45 por ciento del promedio en tonalidad marrón. En consecuencia, la vegetación en la región muestra valores por debajo del promedio histórico, ya que los períodos prolongados de lluvia deficitaria han sido potenciados por temperaturas que superan los promedios históricos. Estas condiciones han deteriorado la salud de la vegetación y han provocado un alto número de incendios forestales, desde el sur de México hasta Brasil, que han degradado la calidad del aire.

Se han observado lluvias abundantes en corto período de tiempo en unas pocas áreas, pero sin la frecuencia necesaria para favorecer las actividades agrícolas. De hecho, estas lluvias han tenido el efecto contrario, pues la intensidad de las lluvias ha ocasionado el lavado de los suelos que se encontraban en preparación para la siembra. 

Si bien algunos modelos agroclimáticos sugieren que las siembras han iniciado en varias áreas porque se cumplieron los umbrales de lluvia requeridos, su frecuencia ha sido insuficiente. De esa cuenta, la siembra muestra un retraso de 10 a 20 días respecto a las fechas usuales, por condiciones de humedad desfavorables. Por lo tanto, los agricultores esperan la continuidad de las lluvias para evitar pérdidas durante las fases fenológicas tempranas, como ocurrió el año pasado. 

Haití ha mostrado una mejora considerable en las condiciones de la vegetación en el sur y el norte del país. Sin embargo, una amplia zona de vegetación estresada persiste en Centre y Artibonite por la continuidad de condiciones secas y temperaturas por arriba del promedio por períodos prolongados, a pesar de las lluvias reportadas la semana pasada. En áreas focalizadas de Grand’Anse y Sud-Est, la intensidad de las lluvias ha generado inundaciones y deslizamientos de tierra. En Ouest, específicamente al oeste del Étang Saumâtre, conocido también como Lac Azuéi , se reportan valores de la vegetación significativamente por arriba del promedio, debido a la orografía de lugar. 

En Sudamérica, el aumento en la cantidad y frecuencia de las lluvias ha permitido una importante recuperación en la salud de la vegetación en gran parte de Colombia y el oeste de Venezuela, como se muestra en la Figura 2; sin embargo, el centro de Venezuela continúa con condiciones por debajo del promedio, debido al actual fuerte déficit de humedad que persiste con valores de lluvia promedio o por debajo del mismo. Se requiere del aumento de los valores de precipitación para erradicar las condiciones secas de largo plazo en Barinas, Apure, Guarico, Bolivar, Anzoategui, Monagas y Delta Amacuro. En general, la recuperación de los caudales de los ríos en Colombia y Venezuela es lenta, especialmente en el estado de Bolívar en Venezuela donde los niveles de los ríos y del embalse de Guri continúan con valores por debajo del promedio.

En el corto plazo, podrían producirse inundaciones en el sur de Haití, mientras que las olas de calor continuarán en Centroamérica, Venezuela y Colombia hasta que las lluvias se regularicen. Los pronósticos indican un aumento significativo en los valores de precipitación a partir de mediados de junio de 2024. Este cambio en el patrón de precipitaciones favorecerá el establecimiento de la época lluviosa y el inicio de las actividades de siembra de granos básicos en toda la región. A la vez, el aumento en la nubosidad permitirá reducir las altas temperaturas registradas hasta la fecha. No obstante, la Organización Meteorológica Mundial pronostica probabilidades superiores al 70 por ciento de temperaturas por arriba del promedio (Figura 3). 

Los mayores acumulados de lluvias tienen el potencial de ocasionar inundaciones y deslizamientos focalizados, así como movimientos de masa desde las partes altas de los volcanes activos en la región, provocando problemas en las partes media y baja de las cuencas. Además, la combinación de altos niveles de humedad y temperaturas por arriba del promedio favorecerá la aparición de plagas y enfermedades en los cultivos. 

El pronóstico de mediano plazo de momento no indica que el período canicular pueda representar un problema para los cultivos de la temporada de Primera en Centroamérica. 

Cita recomendada: FEWS NET. Centroamérica y Haití Monitoreo Estacional, mayo 2024. Altas temperaturas y lluvias esporádicas retrasan la temporada de Primera en Centroamérica.