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- Luego de fuertes déficits de humedad a inicios del ciclo de Primera en Centroamérica, el aumento en los acumulados de lluvia en junio ha ocasionado suelos mayormente saturados en varias áreas de la región. Se han reportado daños focalizados a causa de este cambio en las condiciones climáticas, incluyendo una mayor incidencia de plagas y enfermedades a causa de la persistencia de altas temperaturas.
- Contrariamente, Colombia y Venezuela reportan condiciones de precipitación errática, pero principalmente por debajo del promedio en sus áreas orientales. Sin embargo, las zonas de producción de granos básicos en ambos países continúan con condiciones favorables para el desarrollo de los cultivos.
- Para el siguiente trimestre, se pronostican altos acumulados de lluvia para Centroamérica, y una tendencia contraria para gran parte de Colombia y Venezuela. En todo caso, se prevé la continuación de temperaturas anormalmente altas que favorecerán la aparición de plagas y enfermedades en las áreas húmedas, y la pérdida adicional de humedad en las zonas deficitarias.
En Centro América, el patrón de lluvias deficitario evidente durante marzo - mayo 2024, cambió a partir de junio. Las lluvias registradas durante ese mes erradicaron los valores negativos en la mayor parte de la región; incluso, en zonas focalizadas cambiaron a valores superiores al promedio. La Figura 1 muestra condiciones de lluvia cercana o arriba del promedio para los últimos 30 días de observación (al 25 de julio). Los mayores acumulados, representados con tonalidades celeste y azul, se focalizan en la región fronteriza del Pacífico entre Nicaragua y Costa Rica.
Este aumento de las precipitaciones, la continuidad de días con lluvias y los acumulados abundantes han provocado exceso de humedad en los suelos, saturando áreas de cultivos que se han visto afectadas por inundaciones y deslizamientos focalizados. El aumento de humedad en el ambiente y las temperaturas por arriba del promedio han favorecido la aparición de plagas y enfermedades. La saturación en los suelos también ha afectado infraestructura de riego y vías de comunicación, aumentando los costos de producción. En varias zonas, los agricultores de subsistencia han realizado más de una siembra para el ciclo de Primera, debido a las condiciones secas al inicio y las lluvias por arriba del promedio durante junio. Estas últimas provocaron que las semillas se lavaran o bien los cultivos fueran afectados por el exceso de humedad en etapas fenológicas tempranas. En otros casos, el aumento en la velocidad del viento durante las lluvias ha producido acame, provocando pérdidas en ciertas zonas elevadas de Guatemala.
Durante julio, el paso de huracán Beryl al norte de la región, a inicios del mes, provocó lluvias focalizadas en el Caribe centroamericano. No obstante, en los departamentos de Izabal y Petén en Guatemala, y el Caribe de Nicaragua persistieron las condiciones por debajo del promedio manteniendo condiciones secas en los registros de más de 90 días. Por otro lado, la continuidad de ondas del este favoreció condiciones de humedad en el Pacífico de la región, produciendo inundaciones y desbordamiento de ríos. A pesar de que el norte de Centroamérica se encuentra en el período canicular y con el ingreso de polvo del Sahara, la disminución de las precipitaciones no es propia del período, en algunos casos se ha reportado desborde de ríos y un aumento en la velocidad del caudal, afectando cultivos e infraestructura.
En Colombia y Venezuela, se evidenció lluvias por debajo del promedio en Amazonas, Vaupés, Guaviare, Guainía, Caquetá y Putumayo en Colombia, así como, Amazonas, Delta Amacuro, Mongas y Bolívar. Aunque se ha observado una disminución de las lluvias durante el mes de julio, la salud de la vegetación muestra condiciones favorables, especialmente en las zonas de producción de granos básicos en Venezuela: Barinas, Apure, Guárico, Bolívar, Anzoátegui, Monagas y Delta Amacuro, y en toda la región del Centro-Pacífico en Colombia, tal y como lo muestra la Figura 2. No obstante, las temperaturas continúan siendo por arriba del promedio en toda la subregión.
El pronóstico de lluvias por arriba del promedio para Centroamérica puesto que el paso constante de ondas del este podría favorecer el aumento de lluvias en el Pacífico centroamericano, aumentando la amenaza de inundaciones, deslizamientos y daños en la infraestructura vial y agrícola, además de aumentar el riesgo de pérdidas de cultivos (Figura 3). Adicionalmente, el aumento de la humedad ambiental podría producir pérdidas en cultivos de maíz que se mantienen en campo por la práctica agrícola de la dobla o bien por un almacenamiento inadecuado del grano durante la postcosecha
En Colombia, se esperan lluvias por arriba del promedio en el centro y norte del país hasta el fin del año y por debajo del promedio en el sur hasta octubre, por lo que Amazonía podría mostrar anomalías negativas en las condiciones de la salud de la vegetación. Mientras que, en Venezuela, se espera que las lluvias estén en rangos promedios durante el mismo periodo. En ambos países, se espera que las temperaturas por arriba del promedio continúen pero que el desarrollo de los cultivos sea normal.
Respecto a la temporada de huracanes, se espera una mayor actividad en la zona del Caribe centroamericano, por arriba del promedio. Estas condiciones incrementan el riesgo de afectación en la región; no obstante, no es posible predecir la trayectoria y magnitud de los eventos ciclónicos.
El monitor estacional se produce para cada una de las cuatro regiones cubiertas por FEWS NET durante la estación de producción. Este informe actualiza los totales de las precipitaciones, las repercusiones sobre la producción y el pronóstico a corto tiempo. Producido por el científico regional del Servicio de Prospección Geológica de Estados Unidos de FEWS NET, el informe es producido cada 20 días durante la estación de producción. Conozca más sobre nuestro trabajo.