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Lluvias por arriba del promedio se han observado en los últimos 30 días en la mayor parte de Centroamérica, lo que ha ocasionado una reducción en el déficit de humedad en el norte de Guatemala.
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El exceso de lluvias en Centroamérica durante las próximas semanas aumentará el riesgo de daño en los cultivos por inundaciones, deslizamientos y desbordamiento de ríos, así como por el incremento en plagas y enfermedades fúngicas.
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La continuación en el déficit en las lluvias agudiza las condiciones de sequía en zonas norte y sur de Haití, aunque se prevé una mejora en las condiciones de lluvia a partir de julio.
Las lluvias por arriba del promedio, que se han registrado en la mayor parte de la región centroamericana en los últimos 30 días, han afectado zonas de cultivos en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. En la Figura 1, las zonas con precipitaciones superiores al 125 por ciento, representadas en tonalidad celeste, se ven ampliamente distribuidas en Guatemala, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Estos valores elevados de la precipitación han afectado las zonas de cultivos de granos básicos en diferentes etapas fenológicas. Los ministerios de agricultura de la región están evaluando todavía los daños. Sin embargo, en el distrito central de Honduras y en el occidente de Guatemala, reportes indican afectación en cultivos de repollo, cilantro, brócoli, lechuga y otras legumbres, debido a la sensibilidad que tienen a lluvias constantes. También se reportan daños en zonas de producción de granos básicos en etapas de desarrollo tempranas en el oriente de Guatemala y occidente de Honduras. El daño a la infraestructura vial dificulta la evaluación de las zonas afectadas, debido a que varias carreteras y puentes han sido dañados por el desbordamiento de ríos, socavamiento y deslizamientos de suelos. En la mayor parte de las áreas, los suelos se encuentran sobresaturados y cualquier lluvia adicional podría aumentar las condiciones desfavorables para el desarrollo de cultivos. En el oriente de Guatemala la humedad ha favorecido las condiciones para la proliferación de plagas y enfermedades de tipo fungoso.
También puede observarse que algunas áreas de El Salvador y centro-oriente de Nicaragua muestran valores de lluvia en el rango del 50 al 75 por ciento respecto al promedio histórico (1991-2020), representadas en la Figura 1 en tonalidad amarilla. A pesar de lo anterior, dichas condiciones continúan siendo favorables para el desarrollo de cultivos. Al momento de la elaboración del presente reporte, no se contabilizan los acumulados de lluvia de la depresión tropical Celia, la cual podría haber reducido dichos déficits.
El pronóstico de corto plazo de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) indica condiciones de precipitación abundante en el corto plazo, como se muestra en la Figura 2. De acuerdo con lo anterior, se esperan precipitaciones de 50 o más milímetros para los siguientes siete días. Debido a la sobresaturación de los suelos, estas precipitaciones pueden aumentar las zonas de cultivos afectadas por inundaciones y deslizamientos de tierra.
El mes de junio se caracteriza por ser uno de los más lluviosos de la temporada de lluvias, y a pocos días para su finalización, muchas áreas ya han superado el 100 por ciento de la lluvia mensual. A su vez, la continuidad del fenómeno de La Niña, de acuerdo con las condiciones de ENSO, favorece la continuidad de lluvias después del mes de junio. Los pronósticos de los distintos servicios meteorológicos de la región indican que el período canicular, que suele ocurrir entre julio y agosto, será promedio; sin embargo, no se descarta su interrupción por días de lluvia durante la misma.
La continuidad de la lluvia errática, con precipitaciones por debajo del promedio y con poca continuidad en los días de lluvia consecutivos, ha reducido la salud de la vegetación en áreas de cultivos en Haití. Sin embargo, las zonas de mayor estrés corresponden a Nord-Ouest y Gonaïves, en la zona norte del país, en donde, de acuerdo con la Figura 3, se observa una amplia zona afectada por déficit de humedad en los suelos. Esta zona se ha ampliado considerablemente respecto al reporte del mes de mayo 2022.
En el sur se observan condiciones mixtas en la salud de la vegetación; esto debido a que algunas zonas elevadas han logrado mantener condiciones de humedad. Sin embargo, hay un aumento constante de zonas con valores por debajo del promedio, que, en algunos casos, muestra corredores; tal es el caso de Sud y Nippes.
El pronóstico indica la continuación de una precipitación por debajo del promedio hasta finales de junio, pero se espera una normalización de estas a partir de mediados de julio. No obstante, dicha normalización podría resultar demasiado tarde para los cultivos de las áreas con un déficit de humedad prolongado.
Además, se espera que las condiciones de precipitación y temperatura favorezcan las siembras de la segunda temporada.
Fuente : UCSB-USGS/FEWS NET
Fuente : NOAA
Fuente : USGS/FEWS NET
El monitor estacional se produce para cada una de las cuatro regiones cubiertas por FEWS NET durante la estación de producción. Este informe actualiza los totales de las precipitaciones, las repercusiones sobre la producción y el pronóstico a corto tiempo. Producido por el científico regional del Servicio de Prospección Geológica de Estados Unidos de FEWS NET, el informe es producido cada 20 días durante la estación de producción. Conozca más sobre nuestro trabajo.