Irregularidad en la distribución de las lluvias

• La región se encuentra con condiciones de El Niño (ENSO) débil, las cuales podrían persistir hasta finales de 2019.

• Lluvias con distribución irregular en tiempo y espacio se observarían durante el próximo mes.

• Temperaturas por arriba del promedio pueden afectar la disponibilidad de humedad en los suelos.

La figura 1 muestra la acumulación de lluvia durante el periodo marzo 6 – abril 5 de 2019 en porcentaje observados del promedio histórico 1981 – 2010, en la cual se puede observar que en las regiones del norte y occidente de Guatemala y occidente y oriente de Honduras se han registrado lluvias que no superan el 50 por ciento del promedio del período, condiciones que han favorecido el desarrollo de incendios forestales. A pesar de que las lluvias en estas fechas no son significativas en relación con el total de la temporada en los países del norte de la región, muestran que los valores son por debajo de los normales, coincidiendo con las condiciones de El Niño débil. El resto de Guatemala y Honduras muestra una acumulación que no superan el 75 por ciento del promedio, exceptuando algunas zonas hacia el Pacífico de Guatemala y la zona caribe oriental de Honduras, donde los valores se sitúan entre el 75 y 100 por ciento del promedio.

Nicaragua muestra condiciones por arriba del promedio en buena parte del país, lo cual podría favorecer siembras tempranas, sin embargo, el pronóstico de irregularidad de las lluvias podría afectar el desarrollo de cultivos si las mismas no son continuas durante las próximas semanas.

Los pronósticos de las próximas dos semanas indican que la lluvia podría estar cercana a los valores promedio, aunque con un comportamiento irregular.

La Figura 2. muestra un 89 por ciento de probabilidad para el desarrollo del fenómeno de El Niño para el trimestre febrero – abril 2019, que decrece hasta llegar a un 49 por ciento para el periodo octubre – diciembre 2019.

A pesar de que el actual fenómeno de El Niño es considerado de intensidad débil, podrían observarse irregularidades de lluvia tanto temporales como espaciales, lo cual podría afectar el desarrollo normal de los cultivos. Por otro lado, los pronósticos de temperatura indican que las condiciones son favorables para que se presenten anomalías positivas entre 0.5 y 1 grado Celsius, lo cual podría reducir la disponibilidad del recurso hídrico.

La Figura 3. muestra que la cantidad de lluvia observada entre el 6 de marzo y el 5 de abril sobre el sur y algunas zonas en el centro y norte de Haití ha sido cercana a o por arriba del promedio con valores de al menos 75 por ciento del mismo, reduciendo los déficits de largo plazo observados desde diciembre.